COCOROTA: EL RATONCITO PÉREZ VIVE EN COCOROTA

Para abrir un negocio tienes que pedir un montón de autorizaciones, licencias, etc. Son imprescindibles para poder empezar. Pero para nosotros la más importante fue la que nos dio el Ratón Pérez, al que pedimos permiso para que viviera en COCOROTA y poder abrir la puerta de su casa a todos los niños.

Siempre nos hemos preguntado cómo se las apaña este ratoncito para poder desplazarse por todo el mundo y que los niños tengan a tiempo su detalle bajo la almohada tras perder un diente.

Su trabajo es una locura, corriendo de aquí para allá. Y, aunque usa un poquitín de magia para conseguirlo, también necesita un lugar donde descansar, tomarse su cafelito y leer los cuentos que más le gustan.

Cuando está en Sevilla, COCOROTA es ese sitio. Es lo mínimo que podíamos hacer por un animalito que se desvive para hacer felices a nuestros hijos.

Desde el principio, el Ratón Pérez estuvo encantado con la idea de alojarse aquí. Y los niños que ya han podido verlo en nuestra tienda, también.

La casa también entusiasma a los papás y abuelos, que no dudan en tirarse al suelo para ver bien el apartamento sevillano de Pérez.

No nos extraña, porque merece la pena ver su sala de estar, a la que no le falta ni un detalle. Si algún día el Ratón Pérez tarda un poquito en dejaros vuestro regalo, perdonadle. Seguramente, cansado de tanto ajetreo, se quedó dormido en su sofá con el calorcito de la chimenea o se le hizo tarde leyendo cuentos. Eso le encanta, sobre todo los de aventuras de gatos.

En COCOROTA nos hemos hecho ya expertos en el Ratón Pérez (Por algo tenemos al mejor asesor), y tenemos libros que nos cuentan su historia y cómo empezó a recoger los dientes de los niños que se van haciendo mayores.

Además, para facilitarle el trabajo, Pérez nos pidió que vendiésemos estas puertas mágicas que vosotros podéis poner en vuestra habitación para que el ratoncito pueda llegar sin problema.

Las puertas de madera están hechas a mano y vienen con el cuento "León, Carmencita y las puertas mágicas" y con un diario de dientes, para que apuntéis la fecha en la que perdiste cada uno. También, con una carta para el ratón.

Las hay rojas, azules, rosas y en color madera oscuro. Al ratón Pérez le encanta usarlas todas.

COCOROTA es el único sitio de Sevilla donde puedes comprarlas.

Contadle a vuestros padres, que comprando esas puertas, además, colaboran con la Fundación Carmen Pardo-Valcarce. Sus trabajadores, con discapacidad intelectual, son los que hacen una a una estas puertas, a mano y con mucho cuidado.

Son muchos los niños que ya han pasado por COCOROTA para llevarse su puerta y la han colocado en su habitación. Todos se van con esa sonrisa de felicidad.

En esta casa le reciben con el deportivo en la puerta y todo, para que pueda hacer más rápido el reparto.

Si queréis jugar en casa a montar su casita, podéis llevaros los animalitos de Sylvanian. Hay familias enteras de ratones, ardillas, conejos... y puedes montar un salón como el que tiene el ratón en COCOROTA, y añadirle además la cocina, el baño, el cuarto de los niños, etc.